El equipo de activistas y defensores de derechos humanos de FundaRedes denunció ante la Defensoría del Pueblo del estado Táchira los tratos crueles e inhumanos contra los migrantes venezolanos por parte de efectivos de seguridad que se encuentran en las alcabalas de las vías hacia la frontera con Colombia.
La ONG aseguró que los organismos de seguridad en puntos de control despojan a los ciudadanos de sus pertenencias, objetos de valor, dinero y hasta ejercen agresión sexual para dejarlos avanzar, según reseña La Nación.
“Por la frontera de Apure, Táchira y Zulia se ha registrado que las alcabalas de cuerpos policiales, Guardia Nacional y Ejército, piden a los caminantes la prueba PCR para saber que no son positivos para Covid-19 como requisito para permitirles pasar, sabiendo que en este país no hay ni insumos médicos, y como no las tienen, les exigen que paguen en dólares o a las mujeres que paguen con el cuerpo. Les quitan dinero, algún objeto de valor, pertenencias básicas”, denuncio Javier Tarazona, director de la organización.
Además, destacó que más de 250 pasos ilegales en Táchira, 180 por el Zulia, y 90 por el estado Apure, son el espacio para que venezolanos que migran forzadamente queden a merced de los grupos armados irregulares, quienes les cobran un monto en pesos colombianos o en dólares según la cantidad de maletas que llevan para permitirles cruzar hacia Colombia.
“En estas últimas semanas FundaRedes ha documentado la perversidad con uniforme, cuando vemos de nuevo a la gente saliendo del país, son venezolanos que huyen de la miseria, del hambre, y en las alcabalas los paran y les quitan el poco dinero que llevan para comer”, dijo Tarazona.