Vecinos La Dolorita, en el municipio Sucre de Miranda, protestaron el martes para rechazar el asesinato de la niña de 11 años de edad, Yadimar Sierra, ocurrido el domingo 13 de noviembre en su vivienda, a manos de un funcionario de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM).
La familia de la niña denunció que en horas de la mañana de ese domingo el agente militar, Alexander Hurtado, habría sostenido una discusión con el tío de la niña a quien, además, habría amenazado.
Relatan que luego de la discusión, cerca de las 10:30 de la noche del domingo, presuntos funcionarios de la DGCIM, vestidos de civil, con chalecos y encapuchados, arribaron al sector a bordo de cuatro camionetas modelo Toyota Hilux y habrían disparado en repetidas ocasiones cerca de la vivienda donde residía Yadimar Sierra y que posteriormente comenzaron a patear la puerta de la casa.
Otros relatos indican que -minutos antes del arribo de estos hombres armados-, Hurtado se encontraba en estado de ebriedad y había realizado una llamada pidiendo apoyo para que una “comisión se hiciera presente en el sitio y lo apoyara”.
Familiares de Yadimar contaron a Provea que en medio de la agitación y el ruido de los disparos, la niña intentó cerrar la ventana de su casa y que, al ver su silueta, Hurtado le habría disparado en dos ocasiones, asestando uno de sus disparos en el cráneo de Yadimir Sierra.
Yadimar Sierra falleció la mañana del lunes 14 de noviembre en el Hospital Domingo Luciani de El Llanito, el principal centro médico del este de Caracas.