Rusia hará todo lo posible para garantizar el acceso del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) a los prisioneros de guerra ucranianos, declaró este viernes el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
«Apoyamos activamente vuestros esfuerzos para garantizar el acceso a los militares tomados como prisioneros. Haremos todo lo que dependa de nosotros para garantizar el acceso a los soldados ucranianos», afirmó al inicio de una reunión con la presidenta del CICR, Mirjana Spoljaric.
Por su parte, la presidenta del CICR destacó la importancia de que los canales de comunicación entre su organización y Moscú continúen siendo «abiertos y constructivos».
«Quisiera asegurarle que me atendré al principio de la neutralidad e independencia y respetaré la confidencialidad donde esto sea necesario», indicó.
Spoljaric celebró la disposición de Moscú a «atenerse al derecho humanitario internacional» e indicó que trabajará para lograr que «todos los Estados respeten la Convención de Ginebra» que estipula el trato a los prisioneros de guerra.
«Estamos convencidos que la línea equilibrada y responsable que busca llevar a cabo el Comité en todo el mundo es importante también en el contexto de los sucesos de Ucrania y en torno a ellos», indicó el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
Recalcó que para Rusia es clave que el CICR «actúe imparcialmente en el caso ucraniano en el marco de su mandato humanitario único».
«Siempre hemos respetado sinceramente vuestro mandato, apreciado la naturaleza imparcial y despolitizada de vuestro trabajo y nunca hemos abusado de nuestra relación con el CICR para lograr determinados objetivos políticos”, señaló.
El jefe de la diplomacia rusa expresó su confianza en que «todos los demás socios del CICR, especialmente sus principales donantes, se atengan estrictamente a esta misma línea».
Llamó la atención de Spoljaric por «las flagrantes violaciones del derecho humanitario internacional por parte del régimen ucraniano, violaciones que son documentadas y pueden ser vistas incluso en las redes sociales y otras fuentes de información». EFE