La primera ministra de Moldavia, Natalia Gavrilita, anunció este viernes su dimisión, que implica la renuncia automática de todo el Gabinete.
«Tras una año y medio al frente de este Gobierno ha llegado el momento de que anuncie mi dimisión», dijo en una comparecencia de prensa, según recoge el portal Publika.md.
El medio moldavo subraya que la renuncia de Gavrilita confirma así los rumores que comenzaron a publicarse en la prensa local este jueves.
«Gobernábamos en un régimen de crisis continua», justificó su decisión la política sin especificar el motivo de su dimisión.
A la vez, indicó que tanto ella como su Gobierno se enfrentaban a un «chantaje energético» y «todos pensaban que íbamos a ceder, como los Gobiernos anteriores que traicionaron los intereses nacionales». «Pero no fue así», apostilló.
Moldavia pasa por grandes dificultades debido a la campaña militar rusa en Ucrania y el bombardeo de la infraestructura energética ucraniana, de modo que ha tenido que recurrir a otros países como Rumanía y Eslovaquia para adquirir los volúmenes de gas y electricidad que le faltan por reducción de suministros de Rusia.
El pasado noviembre las autoridades moldavas y ucranianas calificaron de falsa la aseveración del gigante gasístico ruso Gazprom de que Ucrania roba gas que pasa por su territorio y que está destinado en realidad a Moldavia por contrato, y aseguraron que se trata de un chantaje energético más de Rusia.
Con todo, la dimisión del Gobierno moldavo también era exigida por la oposición que acusaba al Ejecutivo de Gavrilita de no haber negociado un mejor acuerdo de gas con Rusia.
Según el político exiliado Ilan Shor, la dirección del país «no supo afrontar los desafíos y llevó a Moldavia a una crisis energética y económica».
Gavrilita, exministra de Finanzas de Moldavia, se puso al frente del Gobierno de esa república exsoviética en agosto de 2021. EFE