Más de 1.000 ciudadanos europeos han podido ser evacuados ya de Sudán en una operación «compleja» pero «exitosa» iniciada durante el fin de semana por varios países de la Unión Europea, informó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
«Ha sido un fin de semana largo e intenso tratando de sacar a nuestra gente de Sudán. Ha sido una operación compleja, ha sido una operación exitosa», indicó Borrell ante la prensa a su llegada a un Consejo de ministros de Exteriores comunitarios.
El político español confirmó que más de 1.000 ciudadanos de la UE han podido ya dejar el país africano, sin precisar «cifras concretas», de los aproximadamente 1.500 que se encontraban allí al inicio de los combates desatados el pasado día 15 entre el Ejército nacional y los paramilitares, y que han dejado ya al menos 400 muertos y más de 4.000 heridos.
Borrell apuntó que 21 miembros del personal de la delegación de la UE en el país ya se encuentran en territorio europeo, mientras que el jefe de esa misión permanece en Sudán pero ha salido de Jartum.
El alto representante mostró especial agradecimiento a Francia por su labor en la operación de evacuación y a los países que han combinado sus esfuerzos para hacerla posible.
Borrell dijo que estuvo en contacto con los dos generales enfrentados, del Ejército sudanés y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), y aseguró que «ahora que ha terminado el alto el fuego tenemos que seguir presionando por un acuerdo político».
«No nos podemos permitir que Sudán, que es un país muy poblado, implosione, porque enviará ondas expansivas a toda África», apostilló.
Borrell dijo que el mensaje de la comunidad internacional es el mismo: «Hay que parar la guerra, silenciar las armas y empezar a buscar una solución política porque no hay una solución militar a esto», comentó.
«Nuestra gente tenía que salir porque estaban en mitad de una guerra, algunos de ellos heridos. Es imposible seguir trabajando como diplomático», comentó.
El viceprimer ministro irlandés y responsable de Exteriores y Defensa, Micheál Martin, manifestó a su llegada a la reunión el agradecimiento de su país a Francia y España por la labor llevada a cabo.
“Es un fuerte esfuerzo de equipo de la Unión Europea, y apreciamos el trabajo de las autoridades francesas y de las autoridades españolas en particular, que han ayudado a evacuar a ciudadanos de múltiples nacionalidades”, subrayó.
En concreto, especificó que efectivos franceses y españoles ayudaron en la salida de 50 irlandeses de Sudán en las últimas 24 horas.
España evacuó el domingo a una treintena de españoles y a otros 70 ciudadanos europeos y latinoamericanos desde Jartum.
Francia asegura que ha evacuado ya a 388 personas, principalmente ciudadanos franceses pero también de Alemania, Austria, Dinamarca, Finlandia, Grecia, Hungría, Italia, Irlanda, Países Bajos, Rumanía, Reino Unido, Suecia y Suiza.
El dispositivo francés también sirvió para evacuar a ciudadanos de Sudáfrica, Burundi, Etiopía, Lesoto, Marruecos, Namibia, Uganda, Ruanda, Estados Unidos, Canadá, Japón, India y Filipinas.
Italia, por su parte, ha sacado de Sudán a 105 de sus ciudadanos y a 31 extranjeros.
«Hay que calmar las aguas, pero la situación no es fácil», dijo hoy a su llegada al Consejo el ministro italiano de Exteriores, Antonio Tajani.
«Es una catástrofe humanitaria» que «corre el riesgo de contagiarse a la región», dijo por su parte el ministro de Exteriores austriaco, Alexander Schallenberg, cuyo país espera poder seguir expatriando a los 23 ciudadanos que el domingo no pudieron salir del país africano. EFE