El comisionado de la OEA para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos, David Smolansky, calificó como un «acto cruel e inhumano» que Trinidad y Tobago coordine con la dictadura de Nicolás Maduro la deportación de venezolanos de regreso a su país, del que huyen.
«Esto es otro acto cruel e inhumano de la tiranía que no sólo ha expulsado a 5.4 millones de venezolanos, sino ahora también coordina con sus aliados internacionales la expulsión de refugiados en situación de vulnerabilidad. Trinidad y Tobago está violando la Convención Americana de Derechos Humanos y la Convención sobre Refugiados de 1951, ambos instrumentos velan por el principio de la no devolución. Trinidad es firmante de estos tratados», denunció Smolansky
El representante de la OEA consideró que «es inadmisible el uso de una “puerta giratoria” para deportar a refugiados«.
Advirtió que «su vida estará en peligro al regresar a territorio venezolano bajo la custodia de los cuerpos de seguridad del régimen.
Ssmolansky hizo un llamado a la comunidad internacional, la sociedad civil, las organizaciones no gubernamentales, a la Asamblea Nacional y a todos los venezolanos a condenar este maltrato