La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dictaminó este lunes que existen «indicios serios y suficientes» para concluir que agentes estatales cubanos tuvieron participación en la muerte de los opositores Oswaldo Payá y Harold Cepero en 2012.
«En consecuencia, la CIDH concluye que el Estado (cubano) es responsable por la violación del derecho establecido en el artículo I de la Declaración Americana (de Derechos del Hombre) en perjuicio de Oswaldo Payá y Harold Cepero», subraya el organismo del sistema interamericano en un informe sobre el caso.
La primera de las recomendaciones del informe es que Cuba deberá adoptar «medidas de compensación económica y satisfacción» para las víctimas de las violaciones de derechos humanos cometidas en este caso, que son las familias de los opositores y el político español Ángel Carromero.
Según las autoridades cubanas, Payá y Cepero murieron en un accidente vehicular provocado por la conducción temeraria de Carromero en una carretera de Cuba el 22 de julio de 2012, pero las familias de ambos denunciaron desde el principio que se trató de un «atentado» y demandaron al Estado de Cuba ante la CIDH en 2013.