El Senado brasileño aprobó este miércoles la candidatura del abogado Cristiano Zanin para ocupar una plaza en la Corte Suprema, en medio de críticas por su estrecha relación con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, a quien defendió ante la Justicia en causas por corrupción ahora archivadas.
El pleno de la Cámara Alta respaldó, por una amplía mayoría de 58 votos a favor y 18 en contra, el nombre de Zanin, propuesto por el propio Lula por imperativo constitucional para ser uno de los 11 magistrados de la máxima instancia judicial del país.
Zanin ha pasado de defender al presidente Luiz Inácio Lula da Silva en los casos de corrupción que enfrentó en la Justicia a ocupar un asiento en la Corte Suprema de Brasil.
Su nombre, propuesto por el propio Lula, recibió este miércoles el apoyo mayoritario del Senado, requisito indispensable para ser uno de los once magistrados que integran la máxima instancia judicial del país, la cima de la carrera de cualquier jurista.
«Siempre defendí y defenderé el cumplimiento de la Constitución de la República», dijo al abrir su discurso en una comisión de la Cámara Alta para defender su nominación.
Especialista en Derecho Civil y Procesal, Zanin -«Cris» para su entorno más cercano- es una figura clave en la resurrección política del jefe de Estado. El líder progresista le definió una vez como «la gran revelación jurídica de los últimos años». Tiene 47 años y podrá ser juez del Supremo hasta que cumpla 75.
EFE