El actor Kevin Spacey rechazó hoy ser un «acosador sexual» y dijo no tener «una varita mágica» para llevarse gente a la cama, al tiempo que acusó a una de sus supuestas víctimas de buscar «dinero».
En una audiencia celebrada ante un tribunal de Londres, el oscarizado intérprete, de 63 años, responde por segundo día consecutivo a las preguntas de la fiscalía en la corte londinense de Southwark, en el centro de la capital, con relación al proceso judicial iniciado el pasado 28 de junio, donde responde por 12 cargos de delitos sexuales contra cuatro hombres entre 2001 y 2013.
Spacey sostuvo durante su declaración que no es un «acosador sexual» y señaló que «no tenía una varita mágica poderosa que blandía delante de las caras de la gente cuando quería que alguien se acostara» con él.
También tildó de «flojas» las acusaciones de una de las supuestas víctimas, de quien alegó que perseguía «dinero, dinero y dinero».
Spacey consideró que en su situación podría «haber conseguido sexo todo el tiempo» pero encontraba difícil confiar en la gente debido a su fama.
La fiscalía acusó al actor de ser «un gran acosador sexual», en lugar de ser «un gran ligón», como el propio actor se había definido en la vista anterior del jueves, y señaló que cuando supuestamente ocurrieron los delitos, Spacey era «básicamente el chico dorado de la escena teatral de Londres» y sus supuestas víctimas «personas a las que probablemente no se les creería».
Al preguntarle si se consideraba un hombre poderoso, el intérprete respondió: «No tenía una varita mágica poderosa que blandía delante de la cara de la gente cuando quería que alguien se acostara conmigo».
Durante la sesión de la mañana Spacey admitió también que «definitivamente» malinterpretó las señales de una de las personas que le había denunciado, que rechazó un interés sexual en una vivienda en Inglaterra donde se alojaba a principios de la década de 2010.
Sin embargo, agregó que tuvo relaciones «consensuadas» con otros dos denunciantes: uno que lo llevó a una fiesta del mundo del espectáculo a principios de la década de 2000 y el otro un aspirante a actor. EFE