La misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) destacó este domingo la «tranquilidad» con la que se ha desarrollado la votación en el referéndum en Ecuador, donde problemas climáticos han causado inconvenientes en el interior del país.
El chileno Patricio Santamaría, jefe de la misión de la OEA, integrada por quince personas de siete nacionalidades, aseveró que ha sido «bastante tranquila» la jornada.
«Hemos estado siguiendo la elección y, en general, hemos visto que hay algunos problemas, climáticos, inundaciones. La lluvia, que es tan necesaria por una parte, ha generado complicaciones a algunos electores y electoras», dijo.
En una rueda de prensa desarrollada al mediodía en uno de los recintos electorales más grandes de Quito, Santamaría formuló un llamamiento a la población para que acuda a las urnas.
«Hoy día hacen un ejercicio de la democracia, donde cada voto vale exactamente lo mismo», subrayó.
Reveló que ciertos electores les han comentado que sí estaban informados sobre las once preguntas del proceso electoral, mientras que otros se quejaron por la cantidad de preguntas y la poca difusión sobre los anexos de cada una.
Santamaría subrayó que no han tenido reportes de problemas distintos a los climáticos durante la jornada, en la que, entre otras situaciones, hubo un aluvión en la ciudad andina de Alausí, que dejó un herido, 28 familias afectadas, igual número de viviendas afectadas y cinco destruidas.
Hace poco más de un año, en Alausí se dio un gigantesco alud en el que murieron 75 personas.
El jefe de la misión de la OEA comentó que esperan que la jornada se mantenga tranquila, «que no haya hechos que empañen un ejercicio democrático como este, que es muy, muy relevante».
Santamaría, quien subrayó la importancia de la «democracia directa», comentó que entregarán el próximo martes un informe sobre la jornada de este domingo, cuando unos 13 millones de ecuatorianos están convocados a las urnas para responder a once preguntas relacionadas con seguridad, justicia, inversiones y empleo.
En el recinto del colegio San Gabriel, de Quito, los delegados de la OEA dialogaron con integrantes de las juntas receptoras del voto, varios de los cuales destacaron la puntualidad en la instalación de las mesas electorales y la normalidad en el proceso de votación.
En el recinto electoral, se comprobó un ágil desarrollo de las votaciones con escasas filas de ciudadanos y moderado control militar al interior del colegio, y resguardo policial en los exteriores, especialmente para ayudar a que fluya el tránsito.
En los exteriores de ese recinto electoral y otro cercano, las ventas de alimentos en las calles marcaron la tónica, pero en un número significativamente menor a procesos electorales anteriores.
Ecuador, que está en estado de excepción en el sector eléctrico, también vive un «conflicto armado interno», declarado por el jefe de Estado, Daniel Noboa, desde enero pasado contra las bandas criminales a las que tilda de «terroristas». EFE