El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, lamentó que Venezuela revocara a la Unión Europea (UE) la invitación para observar las elecciones presidenciales del 28 de julio y consideró que su presencia habría tenido «un valor añadido muy importante».
«Creo que la Unión Europea hubiera aportado un valor añadido muy importante y lamento mucho que el Gobierno venezolano no haya querido que estuviésemos allí», dijo Borrell al margen de la cumbre de la OTAN que termina este jueves en Washington.
El alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad afirmó que esas misiones son «la joya de la corona de la política exterior de la Unión» y que ningún otro tipo de observación electoral se puede comparar con la que presta la misión comunitaria.
«Creo que nadie está en condiciones de hacer una misión de observación electoral tan completa, tan numerosa, tan técnicamente capacitada y con tanta experiencia como la Unión Europea. Está la Fundación Carter, muy bien, bienvenidos, pero no es comparable ni en dimensión, ni en extensión, ni en el tiempo de permanencia«, afirmó Borrell.
De esa forma, enfatizó que la ausencia de la misión de observación electoral de la UE impedirá a la comunidad internacional tener la garantía de que esas elecciones pueden «ser homologadas» y se ha permitido «la expresión libre de los venezolanos».
«Las misiones de la UE son muy respetadas, reconocidas y valoradas. El estar o no estar te permite o te impide tener una opinión sobre cómo se desarrollan las cosas y, por lo tanto, no podremos decir que esas elecciones han sido o no han sido de una manera o de otra», explicó.
Hasta finales de mayo una misión de la UE estaba en la lista de los observadores invitados a Venezuela, pero el Consejo Nacional Electoral (CNE) revocó la invitación debido a la ratificación de las sanciones personales e individuales del bloque comunitario a miembros del Gobierno y el partido oficialista.
Según el régimen de Nicolás Maduro, más de 635 acompañantes internacionales han confirmado su visita a Venezuela para presenciar el proceso electoral, entre ellos miembros del Centro Carter, fundado por el expresidente estadounidense Jimmy Carter (1977-1981).