El Partido Comunista de Venezuela (PCV) denunció que el régimen de Nicolás Maduro ejecuta «una política de terror en los sectores populares del país» que es alimentada «con operaciones psicológicas y de propaganda», que tienen como objetivo «no solamente neutralizar las protestas populares sino imponer una peligrosa matriz de opinión en la que defender la soberanía popular es lo mismo que ser fascista».
Así lo señaló el secretario general del PCV, Oscar Figuera, tras las denuncias de centenares de detenciones arbitrarias que se han registrado en el país desde el pasado 28 de julio, cuando se realizaron las elecciones presidenciales.
«Defender la Constitución y el estado de derecho no es fascismo», puntualizó Figuera al rechazar el despliegue policial y militar en sectores populares «con claras violaciones a los derechos humanos y al debido proceso», dijo.
«Hemos tenido noticias de desapariciones forzadas temporales; detenciones de adolescentes; requisas arbitrarias y humillantes en las calles; allanamientos ilegales a viviendas y robo de pertenencias; extorsiones y la actuación de grupos parapoliciales en complicidad con fuerzas del Estado», agregó el dirigente del PCV.
Organizaciones de defensa de los derechos humanos han contabilizado más de 20 asesinatos en el contexto de las protestas postelectorales y han documentados más de mil detenciones. No obstante, el propio Nicolás Maduro se ha referido a una cifra de 2000 detenidos.
«Además de este despliegue de violencia, está la campaña de delaciones y ‘sapeo’ que promueven voceros alto gobierno para que se incriminen a vecinos y a compañeros de trabajo en supuestos delitos conspirativos», añadió Figuera.
«También tenemos noticias de despidos de trabajadores por razones políticas tras las elecciones», detalló.
El Buró Político del PCV rechazó, además, «las acusaciones infundadas y las amenazas» que el vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, ha hecho contra el candidato presidencial Enrique Márquez y el dirigente Juan Barreto.
A esta amenaza abierta se suma el reciente intento de operadores políticos del régimen de tratar de presentar al secretario general del PCV, así como al dirigente de izquierda Rafael Uzcátegui, como supuestos «promotores de las guarimbas en Caracas