El Kremlin respaldó este lunes la actuación de la policía durante las protestas pacíficas del pasado domingo en más de 140 ciudades de toda Rusia y durante las cuales fueron detenidas 5.414 personas, al afirmar que se trató de acciones contra transgresores de la ley.
«Con los gamberros y los provocadores no hay conversación posible, la ley debe ser aplicada de modo severo», declaró el portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov.
Según el representante del Kremlin, los «gamberros y provocadores destacaron en mayor o menor medida por una conducta agresiva en contra de los agentes del orden». «Por ello, naturalmente, la policía actúa y toma medidas», sentenció.
El Kremlin se escuda detrás del hecho de que las protestas no habían sido autorizadas y, por tanto, participar en ellas es ilegal.
Las marchas pacíficas en apoyo de Navalni se llevaron a cabo desde Vladivostok en el Lejano Oriente, a Novosibirsk en Siberia, Yekaterimburgo en los Urales, San Petersburgo en el mar Báltico o el centro del poder, en Moscú.
EFE