El papa Francisco ha pasado una noche tranquila, desayunó normalmente, y se trasladó al sillón, mientras continua el tratamiento para la neumonía bilateral y se esperan «probablemente» para hoy los resultados de la tomografía computerizada (TAC) realizada la víspera, informaron fuentes vaticanas.
Francisco está a la espera los resultados de la nueva TAC, tras la última realizada el 18 de febrero que había mostrado la neumonía bilateral, y el pronóstico de los médicos sigue siendo reservado, es decir, no se concreta su evolución.
En el último parte médico del martes se informó de que Francisco, de 88 años, sigue en estado «crítico» pero «estable» en el hospital Gemelli de Roma, donde lleva ingresado 13 días.
Y se explicó que la «estabilidad» de sus condiciones también se refiere a la insuficiencia renal que le había sido diagnosticada en los últimos días, «leve», «bajo control» y que no suscita preocupación entre sus médicos.
El pontífice sigue trabajando desde la habitación del hospital y continua con la terapia de oxígeno, pero con flujos en un porcentaje «levemente reducidos» con respecto a días anteriores.
En estos días ha firmado algunos nombramientos y el lunes decretos de canonización, como el de José Gregorio Hernández Cisneros, el primer santo de Venezuela, además de modificar algunas leyes para dar más poderes a la primera mujer ‘gobernadora’ del Estado de la Ciudad del Vaticano, sor Raffaella Petrini.
También anunció la organización de un consistorio para poner fecha a las canonizaciones, aunque no se ha concretado la fecha.
Este anuncio hizo recordar el consistorio, o reunión de cardenales, en el que Benedicto XVI anunció su renuncia al pontificado.
Con información de EFE