Human Rights Watch (HRW) destacó la importancia de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE UE) que se desplegó para los comicios regionales y municipales de este 21 de noviembre, y la contribución que ésta puede hacer para una transición democrática en Venezuela.
«Los observadores podrían jugar un papel fundamental si ejercen con independencia las amplias facultades de acceso que les concedieron las autoridades electorales, cuestionando de manera oportuna la realidad en el país y documentando violaciones de derechos», expresaron en una columna de opinión el director y la subdirectora de HRW para las Américas, José Miguel Vivanco y Tamara Taraciuk Broner.
Los defensores recordaron que «desde hace años, las elecciones en Venezuela han estado plagadas de irregularidades, señalamientos de fraude y desigualdad de condiciones producto de violaciones de derechos humanos. Las autoridades han inhabilitado, detenido y procesado arbitrariamente a opositores políticos, han intervenido partidos de oposición y han usado el hambre como herramienta de control social».
Vivanco y Taraciuk enfatizaron que para que los venezolanos ejerzan sus derechos a votar y a postularse para cargos públicos «es esencial que se permita un debate abierto en un contexto libre de temores, violencia e intimidación por funcionarios públicos, fuerzas de seguridad y grupos armados partidarios del gobierno«.
«Todos los partidos políticos deberían poder elegir libremente a sus dirigentes, sin injerencia indebida del ejecutivo ni del poder judicial, y la oposición debería poder compartir libremente sus opiniones en los medios de comunicación, las redes sociales y las calles. Se deben desestimar las acusaciones arbitrarias contra políticos de oposición, liberar a quienes han sido detenidos arbitrariamente y permitir a aquellos inhabilitados arbitrariamente postularse a cargos públicos», reclamó HRW.
La organización subrayó que actualmente no se cumplen ninguna de estas condiciones en Venezuela.
«La presencia de observadores electorales con un mandato amplio y posibilidad de acceso, así como experiencia en países con gobiernos represivos, podría contribuir a señalar estos serios problemas con objetividad a medida que surjan. Los observadores también podrían contribuir a sentar las bases para asegurar condiciones que les permitan a los venezolanos ejercer su derecho a votar y a postularse a cargos públicos con libertad en futuras elecciones. Para no perder esta oportunidad, es indispensable que los observadores puedan ejercer y ejerzan plenamente sus mandatos», concluyeron.