La Agencia de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) puso fin este jueves a algunas restricciones para acceder a la píldora abortiva Mifepristone, que permite abortar en las primeras semanas del embarazo.
La eliminación de las limitaciones suponen que la píldora podrá ser recetada por los médicos de forma remota, a través de servicios de telemedicina, y enviada por correo postal a las pacientes.
Mifepristone fue aprobada en 2000 por la FDA, y es administrada junto a otro medicamento, misoprostol, para acabar con el embarazo a los 70 días de gestación (10 semanas).
Hasta ahora, la FDA requería a las pacientes que acudieran en persona a un hospital o centro médico a recoger Mifepristone. Gracias a este cambio, la píldora abortiva estará más disponible para las mujeres que tienen dificultades para viajar o que prefieren acabar con sus embarazos en la intimidad de sus casas.