Finalmente, el tribunal de Casación de Roma rechazó en la tercera y última instancia el recurso presentado por el ex delantero brasileño Robinho, quien con su compañero Ricardo Falco fueron condenados a una pena de entre dos a nueve años de prisión por agredir sexualmente a una mujer albanesa en una discoteca de Milán el 22 de enero del 2013.
Tras un largo proceso judicial, la sentencia fue decretada con la ejecución inmediata de la pena por parte del tribunal compuesto por cinco jueces y presidido por el juez Luca Ramacci, quienes escucharon ambas campanas durante poco más de media hora antes de llegar a la conclusión final.
Si bien la sentencia es firme, sin espacio para una nueva apelación y con la ejecución de la pena inmediata, uno de los temas principales que gira en torno al caso es el pedido de extradición de los culpables a tierras europeas, algo que difícilmente pueda llevarse a cabo ya que desde 1988 la Constitución brasileña no lo permite. Si bien Italia puede pedir la extradición, lo más factible es que el futbolista y el otro acusado cumplan la pena en una penitenciaría del país sudamericano, aunque eso abrirá un nuevo proceso en su país, donde se encuentran actualmente.
Según detalló el medio brasileño UOL, Italia debería solicitar el traslado de la ejecución de la pena a la Justicia brasileña y esperar que el Tribunal Superior de Justicia ratifique esta condena. Sin embargo, desde la Secretaría de Cooperación Internacional de la Procuraduría General de la República, aclararon que todavía “no hay un plazo para el proceso”. Es por eso que se torna difícil saber cuándo serán detenidos ambos.
El medio brasileño Seleção Sportv habló sobre el tema con el especialista en derecho penal Davi Tangerino, quien aseguró: “Desde el punto de vista formal, se encuentran presentes los requisitos para el cumplimiento de esta sentencia. El Estado italiano tiene que notificar formalmente al Estado brasileño. Y también es necesario que nuestro STJ confirme esta sentencia extranjera. El nombre técnico es homologación de sentencia extranjera. Una vez superadas esas fases, la sentencia es ejecutada estrictamente por la Justicia Federal brasileña”.
La defensa del jugador afirmó que pagarán la indemnización solicitada por los abogados de la víctima (60 mil euros) sin que se presente una demanda civil en Brasil.