Al visitar el Hospital Dr. Ricardo Baquero González, mejor conocido como el Periférico de Catia, se puede evidenciar la crítica situación del sistema de salud venezolano.
El centro médico tiene años con la morgue fuera de servicio, por lo que recurrentemente ubican los cadáveres en los pasillos a la espera de que sean retirados.
Así quedó registrado en imágenes tomadas este jueves en el pasillo que conduce al ascensor del hospital, donde se encontraba un paciente fallecido envuelto en una sábana sobre una camilla, rodeado por cajas y equipos dañados.
Pero también la crisis se evidencia en el deterioro de las camas, muchas de las cuales tienen los colchones rotos y están cubiertas con bolsas de plástico o llenas de polvo.