El pasado 21 de septiembre, Antonio De Marco asesinó al arbitro italiano Daniele de Santis y a su prometida Eleonora Manta, propinándoles más de 60 puñaladas en las escaleras de la residencia donde vivía la pareja.
El asesino es un estudiante de enfermería de 21 años de edad, quien, según reseña Futbol Red, había sido compañero de piso de Eleonora Manta antes de que De Santis se mudara a vivir con ella.
En ese sentido, De Marco confesó su crimen y aseguró que fue “una tontería”.
“Hice una tontería. Sé que me equivoqué. Los maté porque estaban demasiado felices y por eso me enojé”, dijo el homicida.
Por otra parte, el perfil de Facebook de Antonio fue clave para encontrar su culpabilidad, pues había publicado un mensaje que decía: “Deseo de venganza, un plato para servir frío. Es cierto que la venganza no resuelve el problema, pero por unos instantes te sientes satisfecho”.
Di Marco fue visto por vecinos mientras corría con un cuchillo, una mochila y su rostro cubierto. Sin embargo, el árbitro pudo gritar su nombre antes de morir.