La vacuna contra el COVID-19 desarrollada por Johnson & Johnson genera distintos tipos de respuestas inmunes, lo que la hace efectiva para diversas variantes del virus, algo fundamental para países como Estados Unidos donde están circulando varias cepas.
Los investigadores de la universidad de Harvard, en Massachusetts, que son quienes desarrollaron en primera instancia esta vacuna, analizaron los casos de pacientes que han recibido la monodosis en distintos lugares del mundo para comprobar si estaban protegidos sin importar la variante del virus que se tratara.
Según los resultados de este estudio, la vacuna es efectiva contra todas las variantes que se conocen hasta el momento. El Dr. Dan Barouch, Director del Centro de Virología e Investigación de Vacunas del centro médico Beth Israel Deaconess, en Boston, y profesor de medicina en Harvard, anunció los resultados indicando que le satisfacía comprobar que la vacuna era tan efectiva en el mundo real como lo había sido en el laboratorio, donde fue probada en animales.
“Son buenas noticias en términos de cobertura inmunológica a las distintas variantes del virus. Nos eleva el ánimo con respecto a las vacunas que tenemos actualmente, en especial la de Johnson & Johnson, que demostró buena cobertura contra las variantes que circulan actualmente”, declaraba Barouch mientras revelaba a la prensa los resultados de su investigación. “Hoy presentamos una razón más por la que todas las personas en este país, y en el mundo, deberían estar colocándose la vacuna lo antes posible”, agregó.
El estudio
Todos los pacientes estudiados desarrollaron anticuerpos neutralizantes, que son esenciales para que el cuerpo pueda tener una respuesta inmune efectiva contra el virus. Pero además, produjeron otro tipo de anticuerpos, como las llamadas células T, a las que informalmente se conoce como los soldados del sistema inmunológico.
En Brasil y Sudáfrica circulan actualmente dos de las variantes más peligrosas que se conocen. En ambos países se estudiaron pacientes que habían recibido la vacuna de Johnson & Johnson. Según los resultados revelados hoy, en esos países -con esas variantes- los pacientes produjeron cinco veces menos anticuerpos neutralizantes que aquellos infectados con la versión tradicional del virus. Sin embargo, generaron la misma cantidad de otro tipo de anticuerpos, incluidas las células T. Por lo tanto, la protección contra el virus de la variante de Brasil y Sudáfrica fue casi tan alta como la protección generada contra el virus tradicional.
Este estudio es parte de la fase 3 de investigación de la vacuna. Los números indican que en los Estados Unidos el 86% de los pacientes que recibieron la vacuna de Johnson & Johnson quedaron protegidos de desarrollar una enfermedad grave o morir: en Brasil la protección fue del 88% y en Sudáfrica fue del 82 por ciento.
La clave, según los investigadores, está en que esta vacuna genera distintos tipos de anticuerpos. Esto hace que el espectro de cobertura sea más amplio, brindando protección contra diversas variantes.
Si bien más de 10 millones de personas han sido inmunizadas con la vacuna de J&J en los Estados Unidos, algunas personas prefieren no colocarse esta dosis única por el temor a los coágulos (seis casos de coágulos en mujeres jóvenes llevaron a las autoridades sanitarias del país a suspender la autorización a esta vacuna hasta que realizaran más estudios, durante el mes de marzo). Pese a que todos los organismos de salud indican que es seguro colocarse esta vacuna, en Estados Unidos -donde es fácil conseguir vacunas de Pfizer y Moderna- muchos prefieren no hacerlo. A finales de junio, millones de estas vacunas podrían vencerse sin llegar a los brazos.
Vía INFOBAE