Datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que el número de nuevos casos confirmados y muertes provocadas por la Covid-19 continuó bajando en el mundo en la última semana.
Sin embargo, insistió en que estas tendencias positivas deben ser interpretadas con cautela en la medida en que muchos países están cambiando su estrategia de test y éstos han disminuido considerablemente, lo que lleva a detectar menos casos que los reales.
Se trata de la tercera semana consecutiva en la que ambos indicadores decrecen a un ritmo, en los últimos siete días, del 24 % y el 18 %, respectivamente.
El total global de la última semana ha sido de 7 millones de nuevos casos de la covid-19 y 22.000 muertes adicionales, con declives observados en todas las regiones.
Con esto, el total de personas infectadas desde que empezó la pandemia y que se hicieron un test de diagnóstico se eleva a 496 millones, mientras que las muertes llegan a 6 millones globalmente.
Durante la semana que ha pasado, Estados Unidos reportó el mayor número de muertes (3.682), seguido de Corea (2.186), Rusia (2.008), Alemania (1.686) y Brasil (1.120).
Europa y la región del Pacífico Occidental, que incluye a China, registraron los mayores descensos de casos, de 26% en ambos casos.
Africa fue el continente con la disminución más pronunciada de nuevas muertes (-40%).
En el mismo informe epidemiológico, la OMS indicó que sigue vigilando varias subvariantes de la variante ómicron, que representa el 99,2% de todas las secuenciaciones genéticas que se realizan en el mundo.
Los científicos están siguiendo así la evolución de las subvariantes BA.1, BA2, BA3, así como las más recientes BA.4 y BA.5, además de la forma recombinada de las BA.1 y BA.2, con el fin de determinar sus características y entender su eventual impacto para la salud pública.
La OMS también confirmó que aunque ómicron puede esquivar la inmunidad que ofrecen las vacunas, se sigue viendo que éstas son eficaces a la hora de evitar enfermedades graves y hospitalizaciones.