La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) manifestó su más enérgica condena a la sistemática violación a la libertad de prensa por parte del régimen de Nicolás Maduro. La entidad se pronunció así en respuesta a la nueva escalada de ataques contra medios de comunicación independientes en Venezuela.
«Aunque estamos acostumbrados a la barbarie del régimen contra la libertad de prensa, no podemos dejar de condenar esta nueva ola de agresiones y ataques del gobierno venezolano con la intención de seguir silenciando a medios y periodistas independientes», expresó Jorge Canahuati, presidente de la SIP y del Grupo OPSA, con sede en Honduras. Agregó que «el régimen siempre aprovecha la desviación de la atención que provocan otros hechos noticiosos, como la instalación de la polémica Asamblea legislativa propia, para tratar de actuar impunemente en contra de la libertad de prensa».
En la más reciente agresión, el 8 de enero, fue desmantelada la corresponsalía en Caracas del canal de TV Digital VPITV, durante un operativo conjunto entre la entidad reguladora de telecomunicaciones, CONATEL, y la de recaudación de impuestos, SENIAT. Desde su sede en Miami, la directiva del medio digital denunció la incautación de equipos de transmisión, cámaras y computadoras, entre otros implementos de trabajo. También ese día el medio digital Tal Cual sufrió un ciberataque.
«No podemos bajar la guardia», dijo Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, ante los nuevos ataques. El director del diario La Voz del Interior, de Córdoba, Argentina, añadió: «Insistiremos con nuestra denuncia ante los organismos intergubernamentales y gobiernos democráticos de la región, para que nadie quede sin condenar a este régimen que continúa violando en forma sistemática los principios sobre libertad de prensa que emanan de la Carta Democrática Interamericana y de otros documentos internacionales que identifican a las libertades de expresión y de prensa como fundamentos esenciales de las sociedades libres».
En otros hechos de relevancia, el diario Panorama, de Maracaibo fue sancionado por cinco días por el SENIAT, lo que dejó fuera de funcionamiento la web del periódico desde el 7 de enero. El régimen también acusó a los medios Efecto Cocuyo, Caraota Digital, El Pitazo y a Radio Fe y Alegría, de ser «mercenarios del periodismo» y recibir financiamiento del extranjero para derrocar al gobierno. Luego de la acusación, la sede de la radio en el estado Monagas fue asaltada y robado su equipo de trasmisión.
En su última resolución, la SIP, tras un informe pormenorizado de más de un centenar de agresiones contra periodistas y ataques contra medios independientes en los últimos meses, exhortó a condenar la sistemática violación del régimen a las libertades de expresión y de prensa, y a exigir el cese de la criminalización de la actividad periodística.