Las autoridades estadounidenses trasladaron este viernes a la Base Conjunta de Cape Cod al grupo de migrantes, en su mayoría de Venezuela, que fueron enviados de forma intempestiva la noche del miércoles por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, a la isla Martha’s Vineyard.
Las campanas de la iglesia de St. Andrew, a donde fueron albergados durante estos tres días, comenzaron a sonar la mañana de este viernes cuando los 50 inmigrantes abordaron los autobuses de Vineyard Transit Authority para llevarlos al ferry y luego a una instalación militar, reportó The Vineyard Gazette.
Los habitantes de la isla despidieron a los migrantes con abrazos y algunos hasta soltaron lágrimas, luego de tres días brindándoles apoyo.
La oficina del gobernador de Massachusetts, el republicano Charlie Baker, informó más temprano en un comunicado que el traslado sería voluntario y agradeció a las autoridades locales de Martha’s Vineyard que se movilizaron para recibir a los inmigrantes, entre ellos varios niños.
La Agencia de Manejo de Emergencias de Massachusetts (MEMA) está coordinando los esfuerzos entre funcionarios estatales y locales para garantizar el acceso a alimentos, refugio y servicios esenciales para estos hombres, mujeres y niños.
Baker informó que activarán hasta 125 miembros de la Guardia Nacional de Massachusetts como parte de la ayuda ante la contingencia.
Con información de EFE