China prohibió este jueves el servicio de noticias internacionales de la BBC, asegurando que “violó seriamente” las regulaciones de Beijing.
Con información de AFP / EFE
La agencia de medios de comunicación del gigante asiático indicó en un comunicado que la emisora británica incumplió “la exigencia de que el periodismo sea veraz y justo” y no dañe sus “intereses nacionales”.
Por ello, la agencia “no permite que la BBC continúe retransmitiendo en China, y no acepta la renovación de su permiso anual”, indicó el texto.
La BBC se pronunció de inmediato sobre la decisión y, en un comunicado propio, una portavoz dijo que la empresa está “decepcionada de que las autoridades chinas hayan decidido tomar este camino”.
“La BBC es la emisora mundial más fiable e informa en todo el mundo de manera justa, imparcial y sin miedo ni favoritismos”, añadió.
Además, el gobierno británico acusó el jueves a China de censura, ya que su decisión de prohibir BBC llegó tras un informe controvertido sobre el trato de ese país a la minoría uigur.
Hablan las autoridades
El secretario de Relaciones Exteriores, Dominic Raab, calificó la decisión de evitar que el canal de noticias se transmita en China continental como “una restricción inaceptable de la libertad de prensa”.
“China tiene algunas de las restricciones más severas a las libertades de los medios de comunicación e Internet en todo el mundo, y este último paso solo dañará la reputación de China a los ojos del mundo”, tuiteó.
El Reino Unido y China han protagonizado varios episodios en los últimos meses que revelan tensiones diplomáticas cada vez mayores. Así ha sido al respecto de la represión de China en la ex colonia británica de Hong Kong, la preocupación por la seguridad en torno a la tecnología de Huawei y el trato hacia los musulmanes de etnia uigur en la región china de Xinjiang.
El jueves pasado, la británica Ofcom revocó la licencia de CGTN, el canal hermano en inglés de la emisora estatal CCTV, luego de concluir que el gobernante Partido Comunista de China tenía la responsabilidad editorial final del canal.
En respuesta, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China acusó a la British Broadcasting Corp -responsable de la BBC- de promover “noticias falsas” en su informe sobre el COVID-19, exigiendo una disculpa y diciendo que la emisora había politizado la pandemia y “refritado las teorías sobre el encubrimiento por parte de China”.