La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) manifestó su preocupación por el impacto de la pandemia en la situación de los derechos humanos de las mujeres cis y trans que ejercen trabajo sexual en las Américas.
La CIDH ha recibido información de organizaciones de la sociedad civil que indican que, en el contexto actual, las mujeres cis y trans trabajadoras sexuales han visto agudizada la situación de violencia, discriminación, pobreza, falta de vivienda y acceso a programas de salud y asistencia social.
La Comisión tiene conocimiento de que las mujeres cis y trans trabajadoras sexuales se han visto afectadas por la ausencia de ingresos ante la imposibilidad de ejercer su labor durante las medidas de confinamiento y distanciamiento social. Ante la imposibilidad de cubrir los costos de servicios esenciales, como electricidad, agua o, incluso, el pago de alquileres, muchas han sido desalojadas de sus viviendas.
Asimismo, la CIDH destaca la exclusión de las mujeres cis y trans trabajadoras sexuales de los subsidios y otras medidas económicas adoptadas por los Estados para hacer frente a las consecuencias de la pandemia.
Ante todo ello, la CIDH reiteró su llamado a los Estados a reforzar las garantías a los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales (DESCA), de manera particular, durante las medidas de contención y mitigación de la pandemia, y a erradicar la estigmatización y discriminación a la que están expuestas.
Al respecto, la CIDH llama a los Estados a garantizar el derecho a la salud, mediante políticas de prevención y cuidado que sean respetuosas de la identidad/expresión de género de las mujeres trans, en particular de las que ejercen la labor sexual.
Además, insta a los Estados a tomar medidas de prevención de la violencia y de sensibilización con perspectiva de género a todos los funcionarios del Estado, incluyendo a las fuerzas policiales, con el fin de generar confianza en las interacciones de las mujeres con los representantes del Estado.