El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un paquete de ayuda y gastos para la pandemia por valor de 2,3 billones de dólares que restablecerá las prestaciones por desempleo de millones de estadounidenses y evitará el cierre del gobierno federal, poniendo así fin a una crisis creada por él mismo.
Trump, que deja el cargo el 20 de enero después de perder las elecciones de noviembre ante el presidente electo Joe Biden, se retractó de su anterior amenaza de bloquear el proyecto de ley, que fue aprobado por el Congreso la semana pasada después de que sufriera una intensa presión por parte de legisladores tanto republicanos como demócratas.
El presidente republicano, estuvo jugando al golf el domingo y permaneció lejos del público. Había exigido que el Congreso cambiase la norma para aumentar el tamaño de los cheques de asistencia personales de 600 dólares a 2.000 dólares.
No estaba inmediatamente claro por qué Trump, que se ha negado a reconocer la derrota de Biden, cambió de opinión sobre el paquete de estímulo. Su reticencia había amenazado con añadir más caos en la recta final de su presidencia.
Después de firmar el proyecto de ley a puerta cerrada en su club de playa, Trump cambió su cara. Dijo que firmó la ley con “un sólido mensaje que deja claro al Congreso que hay artículos ineficientes que deben eliminarse”.
“Mucho más dinero está llegando”, insistió en un comunicado, aunque no proporcionó nada para respaldar esta promesa.