La llegada de ciudadanos rusos a la vecina Finlandia por carretera aumentó un 57 % este miércoles, día en el que el presidente Vladímir Putin anunció la movilización de 300.000 reservistas para luchar en la guerra de Ucrania, informó este jueves la Guardia de Fronteras finlandesa.
A lo largo de la jornada un total de 4.403 ciudadanos rusos cruzaron la frontera del sureste finlandés, la más concurrida debido a su proximidad con San Petersburgo, según las autoridades fronterizas.
«El tráfico fronterizo se intensificó durante la noche en los puntos fronterizos del sudeste de Finlandia y hubo más llegadas al país de lo normal. El tránsito de entrada también ha seguido siendo intenso esta mañana», señaló la Guardia de Fronteras en Twitter.
Según las autoridades fronterizas, la situación está bajo control pese al súbito incremento del tráfico procedente de Rusia, aunque seguirán de cerca su evolución para comprobar si se mantiene esta tendencia.
Finlandia se ha convertido prácticamente en el único país de entrada para los ciudadanos rusos a la Unión Europea (UE), debido al cierre del espacio aéreo a los aviones rusos y al bloqueo virtual de las fronteras terrestres de las repúblicas bálticas y Polonia a nacionales de ese país a consecuencia de la guerra de Ucrania.
El país nórdico se ha sumado a las sanciones europeas y ha reducido un 90 % la emisión de visados a los ciudadanos rusos, aunque de momento no ha decretado un veto total porque estaba a la espera de que la UE coordinase una respuesta conjunta.
Con las conexiones aéreas y ferroviarias cortadas, miles de rusos siguen llegando diariamente a Finlandia por carretera, la mayoría cruzando los cuatro puestos fronterizos del sureste de Finlandia (Vaalimaa, Nuijamaa, Imatra y Niirala).
Todos los rusos que llegan al país nórdico tienen un visado válido para toda la zona Schengen, por lo que muchos continúan viaje a otros destinos europeos.
Por ello, y ante la falta de acuerdo europeo sobre la concesión de visados a los ciudadanos rusos, el ministro finlandés de Exteriores, Pekka Haavisto, anunció el miércoles que su Gobierno se está planteando endurecer aún más la entrada a los nacionales de Rusia.
«Finlandia no quiere ser un país de tránsito para los visados Schengen emitidos por otros países», afirmó Haavisto a la prensa.
Con información de EFE