La muerte de Eugenia, quien estaba a poco tiempo de cumplir 9 años, había sido determinada como un suicidio. Sin embargo, las autoridades encontraron pruebas sospechosas en la escena y decidieron continuar la investigación.
La niña que vivía junto a su familia en Córdoba, Argentina, habría salido a jugar el sábado 22 de noviembre, pero horas después fue hallada ahorcada en un árbol, junto a una escalera donde presuntamente se habría subido para lograr guindarse el árbol y quitarse la vida.
A pesar de que todo indicara ser un suicidio, el fiscal a cargo, Guillermo Monti, vio sospechoso que una niña de tan solo 8 años pudiera preparar todo este plan para quitarse la vida.
Por ello, la principal hipótesis incluye el entorno de la niña, lo cual convierte a sus familiares en sospechosos de haber armado el escenario de un presunto suicidio para ocultar un crimen, según reseña TN.
En este sentido, la hermana mayor de Eugenia, de 11 años, fue sometida a cámara Gesell para determinar si ambas o sólo la menor habían sido víctimas de abuso.
Según publicó el portal local Hoy Día, tras la declaración de la adolescente la Justicia ordenó detener a un medio hermano de la víctima, que vivía con ella en la misma casa junto a su padre, la actual pareja del hombre y otros tres hijos de distintos matrimonios.