La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha asegurado este sábado que Rusia se enfrentará a costes económicos “sin precedentes” si decide finalmente invadir Ucrania, lo que acarrearía una batería de sanciones “rápidas, severas y solidarias” contra individuos, instituciones financieras e industrias clave del país.
“Impondremos sanciones financieras de gran alcance, controles de exportación y apuntaremos a quienes son cómplices, ayuden o instiguen una invasión no provocada”, ha avisado la vicepresidenta de Estados Unidos durante su comparecencia en la segunda jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich.
“Que nadie se llame a engaño: la imposición de estas medidas infligirá un daño enorme a los responsables”, ha indicado la vicepresidenta.
Asimismo, Harris ha insistido en que Rusia continúa haciendo un ejercicio de “desinformación, mentiras y propaganda” por el que, asegura, el Kremlin alegará ignorancia e inocencia” mientras crea un “pretexto falso para la invasión”. “Un libro de jugadas”, ha apostillado, “que todos conocemos demasiado bien”.
La vicepresidenta, además, ha confirmado el envío de 6.000 soldados estadounidenses a Rumania, Polonia y Alemania pero ha afirmado que las fuerzas estadounidenses no lucharán dentro de Ucrania, si bien “defenderán cada centímetro del territorio de la OTAN”.