El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se comprometió a «recuperar, de verdad, el estrago» causado por las lluvias en el litoral de Sao Paulo, que dejan al menos 36 muertos y 40 desaparecidos, y reconstruir en áreas «seguras» las viviendas afectadas.
«Puedo garantizar que mis ministros estarán dispuestos a conversar para que hagamos una alianza para recuperar, de verdad, el estrago que la lluvia hizo aquí en Sao Paulo», señaló el mandatario en un pronunciamiento en Sao Sebastiao, el municipio más castigado.
Lula da Silva interrumpió sus días de descanso en el estado de Bahía para sobrevolar y conocer in situ las áreas afectadas por el intenso temporal que azotó el fin de semana al turístico litoral del estado de Sao Paulo, en mitad de los festejos con motivo del Carnaval.
En su declaración a los medios, el líder progresista puso a disposición de las autoridades locales recursos federales para «ayudar a recuperar» la ciudad de Sao Sebastiao, donde se han registrado 35 de los 36 fallecidos, según datos oficiales.
«Ustedes van a volver a tener un nido para cuidar a sus familias», aseguró a las familias afectadas presentes en el acto.
El jefe de Estado también quiso mandar un mensaje de unidad al lado del gobernador de Sao Paulo, Tarcísio de Freitas, aliado del ahora expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro.
«Es una demostración de que es posible ejercer nuestras funciones en democracia, aunque pertenezcamos a partidos diferentes. El bien común es mucho más importante que cualquier divergencia que podamos tener», expresó.
Con ese clima de cordialidad, pidió a las autoridades municipales encontrar una zona segura para «reconstruir» las casas que fueron sepultadas o resultaron seriamente damnificadas por corrimientos de tierra durante las precipitaciones.
«De vez en cuando, la naturaleza nos sorprende, pero muchas veces también la desafiamos», por eso hay que pensar «en un lugar seguro para que podamos comenzar a reconstruir las viviendas del pueblo de Sao Sebastiao», apuntó.
Lula también instó a trabajar de manera conjunta para rehabilitar la carretera que conecta las ciudades de Santos y Río de Janeiro, que ha sufrido numerosos daños.
«Queremos ayudar a recuperar esta ciudad», insistió.
Con información de EFE