La manifestación por el Orgullo LGBTI que ha recorrido el sábado ha sido la más política de los últimos años, con las elecciones generales del próximo 23 de julio a la vuelta de la esquina.
En la capital española la manifestación ha congregado, según los organizadores, a un millón y medio de personas. Desfilaron más de 46 carrozas, con el apoyo de un centenar largo de entidades.
La de Madrid es una de las manifestaciones arcoíris más conocidas, multitudinarias y animadas del mundo, y este año transcurrió con el lema «Por nuestros derechos, por nuestras vidas, ¡con orgullo!», en defensa de la diversidad sexual, afectiva y familiar y la igualdad de derechos.
La marcha, que se ha desarrollado en su tradicional ambiente festivo con carrozas y música, ha contado con momentos de reivindicación, como una parada simbólica ante el ayuntamiento para criticar que la bandera arcoíris no esté colgada de la fachada de Cibeles.
Activistas pidieron «votar con orgullo» para «volver a teñir las calles de colores y demostrar a quienes quieren volver al blanco y negro que somos muchos más».
Con información de EFE