El laboratorio Moderna solicitó la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de EE.UU. para una segunda dosis de refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 para todos los adultos mayores de 18 años. Este pedido abarca a muchas más personas que la solicitud anterior de Pfizer/BioNTech para una autorización de uso de emergencia en mayores de 65 años.
La solicitud se presenta en medio de un acalorado debate sobre cuánto tiempo protegen del contagio las vacunas y si es necesaria la administración de reiteradas dosis para prevenir cuadros graves de la enfermedad y la muerte. Varios países, como Israel, comenzaron a administrar una cuarta dosis a adultos, y hay datos que muestran que la producción de anticuerpos que combaten la infección se ha quintuplicado.
La autorización de una nueva dosisde la vacuna de ARN mensajero para todos los adultos brindaría “flexibilidad” a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de EE.UU. para que decida cuál sería el uso apropiado de una cuarta dosis, indicó Moderna en un comunicado. El acceso generalizado también permitiría a los servicios de salud determinar de forma individual quién podría beneficiarse de una segunda dosis de refuerzo.
Expertos en EE.UU. consideran que el caos en las aplicaciones de dosis de refuerzo podría generar un debate desordenado y confuso sobre quién necesita una nueva dosis y por qué. Tanto Moderna como Pfizer están probando además una dosis de refuerzo específica de la variante Ómicron, cuyos datos podrían conocerse dentro de semanas o meses, lo que genera la posibilidad de que las compañías puedan buscar la autorización regulatoria para una vacuna específica contra Ómicron poco después de las aplicaciones actuales de la cuarta dosis.
Moderna no entró en detalles sobre qué información se incluyó en su solicitud, además de decir que se basó en parte en datos recientes de EE.UU. e Israel sobre la variante Ómicron.