Una mujer agredida por la Policía durante la represión contra una protesta en San Petersburgo por la liberación del opositor ruso Alexei Navalny sigue ingresada en una unidad de cuidados intensivos del Instituto de Investigación de la Medicina de Emergencias I.I.Dzhanelidze.
“Está en una UCI de especialidad cardioquirúrgica, su condición es grave. No ha sido trasladada a la planta”, dijo una fuente del centro a la agencia oficial de noticias rusa Sputnik.
Según el diario Fontanka, la agredida tiene 54 años. Un video que circula en las redes sociales la muestra saliendo al paso de tres agentes antidisturbios que escoltan a un joven durante las protestas de apoyo al opositor. A la pregunta de por qué le han detenido, un Policía propina una patada en el vientre que deja a la mujer tumbada de espaldas en el suelo.
La Dirección del Ministerio del Interior para San Petersburgo anunció haber comenzado una inspección a raíz del incidente.
Un total de 3.324 personas fueron detenidas a lo largo de Rusia durante las decenas de manifestaciones no autorizadas del sábado, según el portal OVD-Info.
Por su parte, una fuente de las fuerzas del orden informó de que al menos 39 agentes de la Policía sufrieron lesiones leves durante esas protestas.
El Kremlin minimiza las protestas
En tanto, este domingo el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, consideró que no fueron tantas las personas que acudieron a las protestas del sábado en más de 70 ciudades de Rusia para pedir la liberación del líder opositor ruso como la gente que expresó con sus votos su confianza en el presidente del país, Vladimir Putin.
“Ahora muchos van a decir que numerosas personas participaron en estas acciones ilegales. No: salieron pocas personas, mientras que muchas han votado a favor de Putin; y muchas personas votaron por las enmiendas a la Constitución” que le ratificaron en el poder.
“Al comparar las cifras, van a entender las pocas personas que eran, aunque también eran ciudadanos rusos”, ha afirmado Peskov en una entrevista al canal Rossiya 1 recogida por la agencia oficial de noticias Sputnik.
Si bien el portavoz se declaró respetuoso “con todos los puntos de vista”, recordó que las protestas no habían sido autorizadas para impedir la propagación de los contagios en el país y se declaró “categóricamente en contra de participación en acciones ilegales”.
Peskov aprovechó para criticar el respaldo de la Embajada de Estados Unidos en Moscú a las manifestaciones. “Por supuesto que son una injerencia indirecta y absoluta en nuestros asuntos internos”, añadió el portavoz.
La misión diplomática estadounidense afirmó que estaba pendiente de las protestas y acusó a las autoridades rusas de suprimir la libertad de expresión y la libertad de reunión. Por su parte, el Ministerio de Exteriores ruso criticó la actuación de la Embajada y prometió citar por ese motivo al representante estadounidense.
EUROPA PRESS