La opositora Unidad Nacional Azul y Blanco de Nicaragua se declaró este domingo en “emergencia permanente” ante los arrestos de varios líderes políticos, incluido cuatro aspirantes a la Presidencia por la disidencia, en los últimos días.
”La Unidad Nacional se declara en emergencia permanente ante la arremetida contra nuestros liderazgos y el de otras organizaciones en Nicaragua”, señaló ese organismo en una declaración.
La Policía de Nicaragua, que dirige Francisco Díaz, un consuegro del mandatario Daniel Ortega, mantiene bajo arresto a cuatro aspirantes presidenciales de la oposición: Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga y Juan Sebastián Chamorro García.
También al extitular del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) José Adán Aguerri, al exvicecanciller José Pallais, y a las dirigentes opositoras de la Unidad Nacional Violeta Granera y Tamara Dávila.
Además, a otros dos ex colaboradores de una ONG que fueron detenidos en las últimas dos semanas bajo la acusación de diversos delitos.