El régimen de Vladimir Putin impuso este viernes el cierre de las oficinas de las organizaciones defensoras de derechos humanos Amnistía Internacional y Human Rights Watch.
La medida en contra de las ONG fue anunciada en un comunicado publicado por el Ministerio de Justicia ruso.
Las ramas locales de Amnistía (Reino Unido) y de HRW (Estados Unidos ) fueron “excluidas del registro oficial de las organizaciones no gubernamentales extranjeras” en Rusia, por “violaciones de la legislación rusa”, subrayó la nota.