Las Fuerzas Armadas ucranianas informaron este martes que, tras la respuesta a la ofensiva rusa en el este del país, consiguieron recuperar la ciudad de Marianka, ubicada a las afueras de Donetsk, mientras que en Izium lograron la retirada de las tropas de Rusia.
El Comando General del Ejército ucraniano publicó en la red social Facebook su balance oficial diario en el que subrayó que la respuesta en Marianka provocó varias bajas en las Fuerzas Armadas rusas, derivando en una retirada y consiguiente dominio ucraniano de la localidad.
Del mismo modo, en Izium, en el noreste, las tropas ucranianas lograron repeler una ofensiva rusa y también provocaron importantes bajas en las filas enemigas, obligándolos a retirarse a posiciones previas.
De este modo, las autoridades militares ucranianas dejaron ver que las primeras horas de la anunciada nueva ofensiva en la región del Donbás se han saldado con una efectiva resistencia, si bien lamentaron que Rusia continua atacando por tierra y aire infraestructuras civiles y militares a lo largo de todo el territorio.
De hecho, Ucrania denunció que el Ejército ruso emplea la red de aeropuertos de Bielorrusia para, desde ahí lanzar sus ataques aéreos a sus objetivos.
Las autoridades ucranianas informaron hoy de otros tres muertos en los últimos bombardeos rusos registrados este martes sobre Kharkiv, la segunda ciudad del país y bajo intenso fuego enemigo desde hace semanas.
Según fuentes locales, los últimos bombardeos sobre Kharkiv, en el este del país, han dejado además 16 heridos.
Las autoridades de la región han advertido asimismo a la población de que la intensidad de los bombardeos ha crecido en las últimas horas y recomendado encarecidamente a los ciudadanos que permanezcan en sus refugios.
Los ataques sobre Kharkiv, donde el lunes se reportaron ya otras nueve víctimas mortales, se suceden mientras desde Kiev se confirmó ya anoche el inicio de la gran ofensiva rusa sobre el este del país, con la intención de controlar todo el Donbás. Se estima que el frente se extiende a lo largo de 480 kilómetros.
En paralelo prosigue el asedio a Mariupol, la estratégica ciudad en el sur de país, donde las tropas rusas han instado repetidamente a rendirse a los últimos soldados ucranianos resistentes, atrincherados en la acería Azovstal junto a un número indeterminado de civiles.