El Kremlin acusó este viernes a la OTAN de involucrarse cada vez más en el conflicto en Ucrania al anunciar el pronto suministro por parte de Polonia y Eslovaquia de cazas MiG-29 a Ucrania.
«Este es un ejemplo más de cómo varios países miembros de la Alianza Atlántica incrementan su nivel de implicación directa en el conflicto», informó Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Peskov advirtió que en el marco de la campaña militar rusa en Ucrania «todos esos equipos militares deben ser destruidos».
«El suministro de esos equipos militares, como hemos dicho en varias ocasiones, no puede influir en la marcha de la operación militar especial, pero pueden traer aún más desgracias para la propia Ucrania y el pueblo ucraniano», aseguró.
Insistió en que no hace falta ser «un experto militar» para entender que el suministro de armamento occidental no repercutirá en el desenlace de la contienda.
Además, también señaló que, «de esa forma, esos países se dedican a dar de baja sus equipos antiguos e inservibles».
El jueves el presidente polaco, Andrzej Duda, anunció que Varsovia enviará cuatro aviones de combate MiG-29 «en pleno funcionamiento» a Ucrania en los «próximos días».
Por su parte, el primer ministro eslovaco, Eduard Heger, adelantó hoy en Twitter que su país entregará a Kiev 13 aviones de combate Mig-29 para ayudarle a «defenderse de Rusia».
«La ayuda militar es clave para que Ucrania pueda defenderse y defender a toda Europa contra Rusia», indicó Heger en su mensaje en esa red social.
La primera ministra danesa, Mette Frederiksen, aseguró este jueves que varios países occidentales discuten la posibilidad de enviar aviones de combate a Ucrania secundando a polacos y eslovacos.
«Los cazas han sido un deseo de la parte ucraniana desde hace tiempo. Es algo que estamos discutiendo en el círculo de países aliados. Pero no voy a entrar en más detalles», dijo Frederiksen en rueda de prensa.
EFE