Polonia, Hungría y Eslovaquia prohibieron la importación y tránsito de productos agrícolas ucranianos, por considerar que sería una amenaza a los cultivos nacionales.
Eslovaquia se suma a la decisión de Polonia y Hungría, por considerar que el levantamiento de los aranceles a Ucrania perjudica sus productos nacionales, mientras tanto Bulgaria como Rumanía se preparan para seguir sus pasos.
La decisión inicial de Polonia había sido calificada ya el domingo de «inaceptable» por la portavoz de la Comisión Europea (CE) de Asuntos Económicos, Arianna Podesta.
Hungría fue el primero en seguir el ejemplo polaco, que prohibió hasta junio la importación de productos agrícolas de Ucrania.
El veto es temporal y el Gobierno húngaro, que aboga por que la UE adopte un plan para una «distribución equilibrada» de los productos ucranianos, asegura que no afectará el tránsito hacia otros lugares de Europa.
Por su parte, el ministro búlgaro de Agricultura, Yavor Gechev, aseguró que espera recibir este lunes información sobre la base jurídica usada por Varsovia y Budapest para vetar la importación de esos productos.
Este martes el asunto será tratado con el presidente del país, Rumen Radev, por lo que es solo una «cuestión de tiempo» que Sofía adopte un veto comparable al de Polonia y Hungría, dijo Gechev.
También los productores agrícolas de Rumanía exigen prohibir la importación de cereales del país vecino.
La Federación para la Agricultura y la Cooperación (AAC) advirtió de que si la situación no cambia, la mayoría de los agricultores rumanos deberán reducir o suspender sus exportaciones.
Pide por eso vetar la importación y el tránsito de los productos agrícolas provenientes de Ucrania entre el 15 de junio de 2023 y el 15 de marzo de 2024.
La federación calificó de «mísera» la cantidad de 10 millones de euros que la CE ha dispuesto para compensar las pérdidas del sector en Rumanía.
Los agricultores han advertido de que organizarán protestas en todo el país a partir del 7 de junio si hasta entonces no se adoptan medidas que mejoren su situación.
Con información de EFE