El Kremlin anunció este viernes la ilegal anexión a Rusia de las regiones del este de ucranianas de Kherson, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk, tras los falsos referéndums realizados por las fuerzas de ocupación rusa.
«Las personas de estas regiones han elegido, es una elección clara. Hoy aceptamos la entrada en Rusia de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, Kherson y Zaporiyia. Estoy seguro que la asamblea de la Duma rusa va a aceptar estas cuatro regiones como nuevos sujetos de la Federación Rusa porque es la voluntad de millones de personas», expresó Vladimir Putin en un discurso desde Moscú.
«Es su derecho, un derecho que nadie les puede quitar que está en las Naciones Unidas, la autodeterminación de los pueblos», argumentó, a pesar de que el propio secretario general de la ONU, Antonio Guterres ha desconocido estas anexiones por considerar ilegítimos e ilegales los referendos realizados por los invasores rusos en el este de Ucrania.
Durante su discurso, Putin hizo una amenaza al Gobierno del presidente Volodimir Zleenski: «Quiero que las autoridades de Kiev me oigan claro: quiero que sepan que estos ciudadanos se convierten en ciudadanos rusos para siempre y nosotros los vamos a proteger».
«Llamamos al gobierno de Kiev a acabar todas las acciones militares y que vuelvan a la mesa de negociación. Estamos preparados. Pero la elección (anexión) de Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporiyia no vamos a negociarlo. Rusia no va a traicionarlos. Van a quedarse en Rusia», añadió Putin.
Aunque aseguró que la Unión Soviética no volverá a existir, confirmó sus intenciones expansionistas al afirmar que «no hay nada más fuerte que nuestra determinación para reunir al pueblo que se considera parte de Rusia. No hay nada más grande que la determinación de estas personas de volver a su patria histórica».