El presidente de Paraguay, Mario Abdo Benitez, emplazó este martes a los mandatarios que asisten a la VII Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) a abordar la situación que vive la diáspora venezolana, una realidad que «no puede ser obviada», sino que debe ser abordada» y para la que hay que «buscar una solución», enfatizó.
En su discurso ante el plenario de la Celac este marte en Buenos Aures, Benítez pidió un «diálogo sincero» y recordó que «así como» preocupan los hechos de violencia ocurridos en Perú y en Brasil, «también» inquieta el «éxodo masivo» de Venezuela.
«No podemos mirar a un lado, cuando más de siete millones de venezolanos han abandonado sus hogares pidiendo refugio» en la región, recordó el presidente paraguayo en la que fue su última intervención en este foro, ya que este año termina su mandato. Además, Benítez recordó que, según ACNUR, la migración venezolana es la segunda crisis de desplazamiento externo de mayor magnitud en el mundo, después de la siria.
En su discurso, el presidente paraguayo destacó que la democracia no solo implica llegar al poder por elecciones libres, sino que «las elecciones nos dan legitimidad de origen, pero el verdadero desafío está en ejercer el poder garantizando la pluralidad política, la dignidad humana, la libertad de expresión, el respeto al estado de derecho y la separación de los poderes».
La alocución del mandatario fue difundida por las redes sociales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Paraguay, ya que las sesiones se celebran a puerta cerrada.
Con información de EFE