Con sólo 14 de 47 votos, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (CDH) aprobó una resolución presentada por Irán, Siria, Turquía y el régimen de Nicolás Maduro, que considera que hay «progresos» en Venezuela y exhorta a mantener la cooperación con la Oficina del Alto Comisionado. La mayoría de los países miembros del Consejo se abstuvieron o rechazaron la resolución.
El documento fue apoyado casi absolutamente por países africanos y asiáticos, varios de ellos con regímenes autoritarios y y cuestionadas situaciones de derechos humanos, como Sudán o Filipinas. México fue el único país latinoamericano que votó a favor de la resolución presentada por la dictadura chavista.
En total, 26 países se abstuvieron, entre ellos los miembros de la Unión Europea, India, Japón, Libia, Nigeria, Togo y Argentina.
Australia, Brasil, Chile, Islas Marshall, Perú, Ucrania y Uruguay votaron en contra.
No hay avances
La delegación de Perú, en nombre de un grupo de países consideró que el régimen venezolano es selectivo a la hora de cooperar con el Consejo de DDHH de la ONU, y que no ha avanzado con el cumplimiento de las recomendaciones hechas por la Alta Comisionada, Michelle Bachellet.
«¿Hubo algún cambio en los patrones de violaciones a los DDHH, se desactivaron los comandos de la muerte que son las FAES, se dejó de perseguir y hostigar a la Asamblea Nacional, a los defensores de DDHH y a los periodistas, el sistema judicial dejó de emitir sentencias contra la propia Constitución venezolana? La respuesta es NO«, dijo la embajadora de Perú.
Por su parte, el embajador de Argentina, Federico Villegas, dijo que hay un «insuficiente reconocimiento por parte de las autoridades venezolanas de su responsabilidad por la situación de los derechos humanos en su territorio».
El embajador de Alemania, en nombre de la Unión Europea, explicó que los países miembros del bloque se abstuvieron porque el proyecto «no va lo suficientemente lejos y no refleja como es debido la grave situación de derechos humanos sobre el terreno«.
Este martes el CDH también considerará una resolución propuesta por más de 50 países que condena las violaciones a los derechos humanos en Venezuela, renueva por dos años el mandato de la Misión de Determinación de Hechos de la ONU que investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos por el régimen de Maduro, y reclama condiciones para elecciones presidenciales y parlamentarias libres.