El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, reveló este viernes que su esposa se vacunó contra al covid-19 en Estados Unidos y recibió una ola de críticas de quienes consideraron esa actitud como un “desprecio” a la salud pública del país.
“Tomar una vacuna es una decisión personal. Mi mujer (Michelle Bolsonaro), por ejemplo, decidió tomarla en Estados Unidos. Yo no la tomé”, declaró el líder de la ultraderecha en una entrevista que publicó este viernes la revista Veja.
Aunque Bolsonaro no lo aclaró, se presume que su esposa se aplicó la vacuna esta misma semana, cuando integró la comitiva oficial de Brasil que asistió a la Asamblea General de la ONU y que regresó sin el ministro de Salud, Marcelo Queiroga, quien se quedó en Nueva York en cuarentena, tras dar positivo de covid-19.
En su discurso ante la ONU, Bolsonaro expuso el pasado martes su negacionismo frente al covid-19, defendió el uso de medicamentos de dudosa eficacia para tratarla y se opuso al llamado “pasaporte sanitario”.
Este mismo viernes, se confirmó además que el diputado Eduardo Bolsonaro, uno de los cinco hijos del mandatario y que también fue a Nueva York, dio positivo por el virus y se está “tratando” en Brasilia.
El hecho de que Michelle Bolsonaro se haya vacunado en Nueva York generó una ola de indignación en círculos políticos, que se expresó sobre todo en una comisión del Senado que investiga unas posibles irregularidades cometidas por el Gobierno frente a una pandemia que ha matado a casi 593.000 brasileños y aún no está controlada.
“Esa escena de la primera dama vacunándose en Estados Unidos es lamentable, desvaloriza a las autoridades sanitarias, desvaloriza una conquista del país que ya tiene más de 30 años, como el Programa Nacional de Inmunización”, declaró el senador Randolfe Rodrigues, vicepresidente de la comisión.