El exgobernador del estado Zulia y fundador del partido Un Nuevo Tiempo, Manuel Rosales, constató la precaria situación que se vive en la parroquia Chiquinquirá de Maracaibo por condiciones “deplorables” en los servicios públicos.
Tras la jornada médica de prevención y distribución de insumos contra el Covid-19 que se realizó este sábado 3 de julio, Rosales destacó que las fallas en los servicios básicos empeora la crisis por el coronavirus, ya que los habitantes no pueden mantener la limpieza necesaria para prevenir los contagios.
«El pueblo sin vacunas ni atención está viviendo una calamidad por la falta de agua, servicio indispensable para mantener la higiene en estos tiempos donde la pandemia del Covid 19 avanza y nuestros centros de salud no cuentan con los insumos y equipos para atender a los enfermos», dijo, según reseña una nota de prensa.
Asimismo, el exgobernador aseguró que “el pueblo está agotado” de que no le solucionen sus problemas, entre ellos la crisis eléctrica y la falta de agua.
«El pueblo está agotado, la actividad comercial, industrial y agropecuaria está seriamente afectada por los continuos cortes eléctricos y fluctuaciones que han dejado a la mayoría de los hogares con equipos y electrodomésticos quemados. El régimen y los destructores del Zulia no tienen perdón de Dios, el pueblo está luchando por sobrevivir a esta debacle impulsada por ellos, donde la mayoría de los hogares tienen enfermos de Covid-19 y requieren del servicio eléctrico», señaló.