Carlos Márquez, presidente de la Sociedad Venezolana de Nefrología, aseguró recientemente que todas las máquinas de diálisis en el país presentaban fallas, otras hay que repotenciarlas y en otros casos, reponer los equipos debido a que -desde hace al menos 10 años- no se adquieren aparatos nuevos.
“A nivel nacional todas estas máquinas están fallando. Las que menos tiempo tienen suman 10 años. Estos equipos generalmente se reemplazan en ese tiempo. Sin embargo, estas máquinas que tenemos son alemanas y de excelente calidad, pero muchas están paradas por repuestos, no se les están haciendo los mantenimientos que requieren y están muchas paradas”, dijo Márquez.
“Con la situación de las máquinas hemos tenido que reducir el tiempo para poder atender a todos los pacientes que llegan a las emergencias y crear un turno intermedio y eso obliga a reducir de 4 a 2 horas la atención a cada paciente cuando requiere 4 horas de diálisis 3 veces por semana y esto aumenta la morbimortalidad de estos pacientes”, recalcó.
Insistió el nefrólogo que “tenemos fallas importantes, por ejemplo, no se está recibiendo la sal que es fundamental para una parte de mantenimiento de la planta que se llama ablandador. No se está recibiendo el Puristeril, este es un desinfectante que se necesita para la desinfección diaria de la máquina y para proteger el sistema interno de los equipos. Estamos usando cloro que es un buen desinfectante pero daña las partes plásticas del equipo”,
Recomendó que para alargar la vida útil las máquinas de diálisis ameritan unos mantenimientos que son competencia del Ministerio de Salud y el Programa de Salud Renal y pese a enviar comunicaciones el especialista refirió que las respuestas no llegan.
Con información de Radio Fe y Alegría